Se deja la Ruta Estatal (SS) 131 en la intersección hacia Orani-Orotelli y, siguiendo la estatal, se llega al pueblo. A lo largo de la calle principal se llega a una plaza frente a la que está la Iglesia de la Virgen de Itria. Siguiendo por el callejón, a pocos metros, se llega a la Iglesia del Rosario.

Contexto ambiental

Orani está en Barbagia di Ollollai, más precisamente a los pies del Monte Gonare (a 1.100 metros sobre el nivel del mar), entre la llanura de Ottana y la cadena montañosa de Gennargentu. La zona abunda en lugares arqueológicos desde la prehistoria. La actual configuración de Orani es fruto de la unión de dos pueblos, el de San Sisto y el de Sant'Andrea.

Descripción

En 1684, se menciona por primera vez la iglesia del Rosario, junto con la hermandad del mismo nombre. Probablemente fue construida durante el siglo XVII, cuando se difundió ampliamente la devoción mariana también en Cerdeña.

La iglesia, de una sola nave y con bóveda de cañón, tiene dos capillas a cada lado con estatuas de madera, algunas de las cuales son de acabados discretos.

Un pequeño púlpito de mármol descansa sobre el último pilar a la derecha del altar. La zona presbiterial está enmarcada por un gran arco de medio punto y bordeada por un balaustre. En el altar de mármol blanco, columnas salomónicas negras enmarcan los nichos donde se encuentra la estatua de madera del siglo XVII de la Virgen del Rosario y dos santos franciscanos.

El elemento artístico más importante de la iglesia lo constituyen las pinturas al temple atribuidas a los pintores Pietro Antonio y Gregorio Are, que datan de mediados del siglo XVIII. Las pinturas representan a Santa Catalina de Siena, a San Pablo el ermitaño, las bodas de Caná, la batalla de Lepanto y el Sermón de Santo Domingo.

Las pinturas de Are expresan con constancia la idea de arte del pintor, similar a las convenciones lingüísticas áulicas y, al mismo tiempo, vinculada a la solicitud de información de las clases populares. De allí el sincretismo gustoso y no inculto entre las figuras de sabor arcaico y la necesidad de imágenes relacionadas con la buena regla del diseño.

En el exterior, la fachada presenta un pequeño rosetón y un portal de vulcanita arquitrabado y con tímpano, del siglo XVI, coronados por una espadaña y todos alineados. Una sutil cornisa rodea la coronación embellecida por cuatro almenas también de vulcanita.

Bibliografía

M.G. Scano, [i]Pittura e scultura del '600 e del '700[/i], colección "Storia dell'arte in Sardegna", Nuoro, Ilisso, 1991, sch. 180. G. Zirottu, [i]Orani[/i], Nuoro, 2000.