Monolitos de Cerdeña
Rutas de senderismo y ciclismo conducen a sus pies, la cumbre es un destino para escaladores
Tacos, puntas y picos rocosos son los testigos mudos de una era geológica que incorporó a sus cuerpos fósiles, esquistos, calizas y dolomías del Cámbrico. Irrumpen prepotentes en los paisajes de Cerdeña, están tan preñados de energía acumulada durante cientos de millones de años que ya en la época nurágica eran percibidos y señalados como lugares de devoción, un sentimiento debido a manifestaciones cósmicas consideradas divinas y sobrenaturales. Gran parte de esa aura mágica y de esa soledad trascendental te llegará al recorrer los senderos que conducen a sus pies. He aquí algunos de ellos, metas de excursiones insólitas.