Incluso desde lejos, se muestra en toda su belleza con colores sensacionales. Budelli es una de las joyas más espléndidas del archipiélago de La Maddalena, famosa por sus aguas turquesas y la playa Rosa, entre las más bellas del Mediterráneo, cuya coloración procede del desmoronamiento de la miniacinia miniacea, un microorganismo rosado que vive en la posidonia dentro de conchas y caracolas, arrastrado a tierra por las corrientes. En Cala Roto, donde se encuentra la playa, Michelangelo Antonioni rodó en 1964 la escena del cuento de la niña en "Desierto Rojo", inmortalizando la naturaleza del lugar en toda su espontaneidad.
Siempre de propiedad privada, Budelli pasó definitivamente a manos del parque nacional en mayo de 2016. Hoy, protegido por restricciones paisajísticas y medioambientales, se puede admirar como una auténtica obra maestra de la naturaleza desde la distancia, acompañado por los guías del parque, sin fondear, bañarse o siquiera pisar sus orillas. Incluso a distancia, la isla desprende todo su encanto. Junto con Razzoli y Santa Maria y la vecina Spargi, constituyen la parte más salvaje del archipiélago. Su costa se extiende por 12 kilómetros y posee un territorio de 25 hectáreas, donde vive sólo el guardián.
Desde su "cima", el Monte Budello (87 metros), la vista es impresionante: acantilados de granito y densa vegetación ocultan calas de arena fina y mar azul, incluida, al noreste, la playa del Cavaliere. Es una maravillosa bahía de arena clara e impalpable, abrazada por rocas doradas y rosadas, cubierta por perfumados arbustos del mediterráneo. El mar que baña la orilla es de un celeste incomparable, casi irreal. No es casualidad que también reciba el nombre de "puerto (o manto) de la Virgen". Detrás de la playa aflora un estanque poblado por garcetas, garzas reales, fochas y ánades reales. Los "Caballeros" también están bajo protección: los barcos tienen prohibido pasar, pero pueden detenerse a cierta distancia en zonas delimitadas.
Para llegar a Budelli, se pueden realizar visitas guiadas y alquilar barcos que parten desde la Costa Esmeralda, La Maddalena, Palau y Santa Teresa Gallura. Todo el archipiélago, conocido como el "santuario de los cetáceos", ofrece fondos marinos ideales para el buceo: entre Budelli y Spargi, no te pierdas el 'bajo' de Washington.