Una historia de fuego y pasión. La imponente basílica de Sant'Antioco di Bisarcio se alza como un castillo sobre la llanura de Chilivani, en el territorio de Ozieri, a pocos kilómetros de la ciudad. A su alrededor se encuentra un pueblo rural, antaño floreciente centro de vida cultural y cívica, Bisarchium (o Guisarchum), así como sede de la diócesis episcopal. La iglesia, construida en piedra volcánica y de diez metros de altura, es una de las más impresionantes del patrimonio románico de la isla. Fue parcialmente destruida por un incendio alrededor de 1090. El archivo se perdió en el incendio, por lo que no podemos datar la fundación con certeza.
El monumento, al que se accede desde la carretera estatal 597, a medio camino entre Ardara y Tula, es una mezcla perfecta del trabajo de varios artesanos: desde el románico pisano al románico lombardo, pasando por elementos franceses de origen borgoñón. Visitando la majestuosa estructura, podrás identificar las tres fases de construcción: la mampostería oriental data del siglo XI, mientras que la segunda fase constructiva, posterior a mediados del siglo XII, se caracteriza por bloques de tamaño medio bien formados. De época posterior es el pórtico de seis crujías sobre pilares en forma de cruz y, en el piso superior, tres habitaciones con tejado de cañón. Destaca especialmente la decoración del ábside, que los maestros pisanos dividieron en segmentos con el uso de semicolumnas con capitel de decoración vegetal y la alternancia de los colores verdosos de la toba y pardo rojizos de la traquita. Adyacente a la iglesia, en el lado sur, se encuentra el campanario, dañado por un derrumbe, adornado con pilastras y arcos colgantes, que también jalonan los laterales y el alzado absidal de la basílica.
Hablando de lugares de culto de extraordinario impacto, se pueden visitar otros dos espléndidos edificios, en el territorio vecino de Oschiri, la iglesia de Nuestra Señora de Castro (siglo XII) y, en el territorio vecino de Ardara, la basílica de Nuestra Señora del Regno. En los alrededores, no te pierdas el castillo de Monte Acuto, la cueva de San Michele, de la que surgió la "cultura Ozieri" (3200-2800 a.C.), Nuraghe Burghidu y el puente romano sobre el río Mannu.