El pueblo de Portoscuso se encuentra frente a la isla de San Pietro, en la costa suroeste de Cerdeña. Alberga el puerto que une la isla con Carloforte, la ciudad de San Pietro, a la que se puede llegar en ferry. La zona ha estado habitada durante muchísimo tiempo, como demuestran las herramientas de obsidiana y las tumbas fenicias de San Giorgio. Sin embargo, el pueblo se fundó a finales del siglo XVII, cuando se construyó una almadraba de atún junto a una torre española del siglo XVI, lo que atrajo a pescadores de Cerdeña, Ponza y Sicilia y dio lugar a una mezcla de culturas. Situada en una región rica en yacimientos minerales y abundantes viñedos, Portoscuso está cerca de varios lugares históricos importantes.