Se impone en el panorama artístico de Sassari por su riqueza arquitectónica y su variedad estilística, que abarca un larguísimo periodo de tiempo, del siglo XII al XIX, y armoniza elementos románicos, góticos, barrocos, rococó y neoclásicos. Santa Maria di Bétlem, dedicada a la Virgen de la Asunción, domina con su volumen la plaza del mismo nombre y la amplia Porta Utzeri (Puerta Utzeri), levantándose delante de un claustro pavimentado, donde destaca la fuente del siglo XVI del "Brigliadore", de brillador. Desde la iglesia parte la Bajada de los Candeleros, el acontecimiento más sentido de Sassari. En su interior se guardan las velas votivas de madera, que se llevan en procesión el 14 de agosto: es sede de siete gremios de oficios: trabajadores de transportes públicos, agricultores, carpinteros, albañiles, horticultores, picapedreros y sastres.