Se toma la Ruta Estatal (SS) 291 que conecta Sassari con Alghero. Hacia el km 16 hay una intersección hacia Olmedo, accesible tras unos kilómetros. La iglesia está en el pueblo.
Contexto ambiental
En el corazón de Nura, el pueblo de Olmedo se extiende sobre un territorio calcáreo y volcánico, rico en restos arqueológicos. La iglesia de Nuestra Señora de Talia se encuentra a poca distancia de la iglesia parroquial. La consagración se debe a un simulacro encontrado en el campo de Olmedo, en el sitio arqueológico de Talia consagrado a la Virgen de Italia. Se utiliza también el nombre de Santa María de Ulumetu u Olmeto, derivado del antiguo topónimo.
Descripción
La iglesia de la Virgen de Talia fascina por el aspecto arcaico de sus formas relacionadas con la sencillez arquitectónica del primer románico en la isla.
Construida en caliza y piedra volcánica, data de la primera mitad del siglo XII. Las paredes inferiores de la iglesia están hechas de pequeños cantones poco labrados, que se transforman en sillares perfectamente escuadrados en la parte superior, probablemente debido a una antigua reconstrucción.
La planta es de tres naves. Las naves laterales presentan bóvedas de cañón peraltadas, mientras que la del medio tiene cubierta de madera. El espacio, muy reducido, está articulado por arcadas sobre columnas que llegan hasta el presbiterio peraltado, precedido por dos pilares de planta cuadrada, a cuyos lados se insertan dos semicolumnas. Los capiteles sobres los que se apoyan las arcadas son cúbicos con esquinas redondeadas.
La fachada es esencial: en el centro se abre un portal arquitrabado con arco de descarga de medio punto. A lo largo de los extremos de las naves laterales, así como a lo largo de las inclinaciones del techo, hay una serie de pequeños arcos que prosigue incluso sobre los lados de la iglesia. La parte central de la fachada se hace más sólida por las robustas pilastras angulares y se complementa con la apertura cruciforme y algunos sillares con cavidades para cuencas de cerámica. En los lados se abren algunas monóforas como en el ábside, cuya superficie está dividida por lesenas unidas por pequeños arcos que descansan sobre ménsulas.