Se puede llegar desde Olbia a través de la Ruta Provincial (SP) 82 hasta el cruce con la Ruta Estatal (SS) 125 en dirección a Arzachena. Desde el centro poblado del pueblo, se toma la Ruta Provincial (SP) 115 hacia Bassacutena. Luego de 4,5 km, se toma el desvío a la izquierda por 2 km, hasta llegar a la tumba de los gigantes de Li Lolghi. Se continúa por cerca de 500 m y se toma el desvío a la derecha. Después de otros 500 metros se llega a los círculos funerarios.
Contexto ambiental
La necrópolis se encuentra en el interior de Gallura, a unos 10 km del golfo de Arzachena. Se desarrolla en un pequeño claro entre suaves y verdes elevaciones.
Descripción
Está construida con granito local y consta de cinco cistas líticas, cuatro de las cuales están rodeadas de círculos de piedras colocadas verticalmente.
Las cistas cuadrangulares probablemente albergaban a un solo difunto y estaban cubiertas originalmente con un lastrón. Una vez cerradas, eran recubiertas con montículos de tierra y gravilla, como lo demuestra la densa serie de pequeñas lastras dispuestas en círculos concéntricos alrededor de las cámaras sepulcrales, que servían para contener el montículo y protegerlo del depósito aluvial causado por las lluvias.
De esta manera, la necrópolis debió constituir en su tiempo una serie de cúpulas cercanas.
Los círculos (5,30-8,50 m de diámetro) son tangentes entre sí y, en la zona interior resultante y al sur, se puede encontrar pequeñas casetas líticas probablemente destinadas para recibir las regulares ofrendas de comida para los muertos.
Se puede apreciar estelas fragmentadas en los círculos que rodean las tumbas en el exterior, mientras que la caseta lítica contiene una estela aislada: son testimonio de un culto funerario, probablemente símbolos de los muertos o efigies protectoras.
Las tumbas han proporcionado pocos restos de huesos, lo cual no permite reconstruir el ritual funerario practicado. Sin embargo, el descubrimiento de adoquines con restos de ocre rojo sugieren la preparación del colorante, el cual era probablemente utilizado sobre el cuerpo mismo del difunto.
Las cerámicas encontradas no están decoradas y son poco significativas, pero los hallazgos líticos son de gran importancia: un recipiente de esteatita de influencia egea con asas de anillo, pomos esferoides, cuchillos de sílex, hachas y cuentas de collar. Durante mucho tiempo en la historia de los estudios, este sitio ha sido considerado como perteneciente a una cultura independiente: la "de los círculos megalíticos" o "de Arzachena", pero luego ha sido interpretado como una facies galluresa de la cultura de San Michele u Ozieri (Neolítico Final , 3200-2800 a.C.). Hoy, por la fuerte similitud tipológica entre el famoso recipiente de esteatita verde encontrado en la necrópolis y las producciones cerámicas correspondientes a la facies San Ciriaco (3.400-3.200 a.C.), culturalmente se tiende a atribuir la necrópolis a esta facies del Neolítico Final de Cerdeña.
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Se puede llegar desde Olbia a través de la Ruta Provincial (SP) 82 hasta el cruce con la Ruta Estatal (SS) 125 en dirección a Arzachena. Desde el centro del pueblo, se toma la Ruta Provincial (SP) 115 hacia Bassacutena. Tras 4,5 km, se toma el desvío a la izquierda por 2 km, hasta llegar a la tumba de los gigantes de Li Lolghi. Se continúa durante unos 500 m y se toma el desvío a la derecha. Tras recorrer otros 500 metros se llega a los círculos funerarios.
Contexto ambiental
La necrópolis se encuentra en el interior de Gallura, a unos 10 km del golfo de Arzachena. Se estiende en un pequeño claro entre verdes colinas.
Descripción
Está construida con granito de la zona y consta de cinco bloques líticos, cuatro de los cuales están rodeados de círculos de piedras colocadas verticalmente. Los bloques cuadrangulares probablemente albergaban un solo difunto y estaban cubiertos originalmente con una plancha de piedra. Una vez cerrados, eran recubiertos con montículos de tierra y gravilla, como lo muestra la densa serie de planchas dispuestas en círculos concéntricos alrededor de las celdas sepulcrales, que servían para contener el montículo y protegerlo del depósito aluvial causado por las lluvias. De esta manera, la necrópolis debió constituir en su tiempo una serie de cúpulas cercanas. Los círculos (con diámetros desde 5,30 m a 8,50 m) son tangentes entre sí y, en la zona interior resultante y a su izquierda, se puede encontrar pequeñas casetas líticas probablemente destinadas para recibir las regulares ofrendas de comida para los muertos. En los círculos se puede ver estelas fragmentadas que limitan las tumbas hacia el exterior, mientras que una estela aislada se inserta en una caseta lítica: son el testimonio de un culto funerario, quizás las marcas de los muertos o efigies protectoras. Las tumbas han puesto al descubierto pocos restos de huesos, lo cual no permite reconstruir el ritual funerario practicado. Sin embargo, el descubrimiento de guijarros con restos de ocre rojo hace pensar en la preparación del colorante, el cual fue probablemente utilizado sobre el cuerpo mismo del difunto. Las cerámicas encontradas no están decoradas y son poco significativas, pero que los hallazgos líticos son de gran importancia: un recipiente de esteatita de influencia egea con asas de anillo, pomos esferoides, cuchillos de sílex, hachas y cuentas de collar. Durante mucho tiempo en la historia de los estudios, este sitio ha dado el nombre a una cultura independiente: la "de los círculos megalíticos" o "de Arzachena", luego interpretada como una facies galluresa de la cultura de San Michele u Ozieri (Neolítico Final , 3200-2800 a.C.). Hoy, por la fuerte similitud tipológica entre el famoso recipiente de esteatita verde encontrado en la necrópolis y las producciones cerámicas correspondientes a la facies San Ciriaco (3.400-3.200 a.C.), se tiende a atribuir culturalmente la necrópolis en esta facies del Neolítico Final de Cerdeña.