El pueblo, situado en la ladera occidental de las colinas de Arcu Sa Cuxu y Montixeddu, está formado por dos núcleos de población: Giba y Villarios. Giba cuenta con abundantes tierras fértiles, lo que ha favorecido el desarrollo de actividades agropecuarias: aquí se producen excelentes quesos, así como viñas, tomates y deliciosas alcachofas. La zona ha sido utilizada por el hombre desde la antigüedad, como demuestra la presencia de domus de janas que datan del 3500 a.C. y de nuraghes. También hay indicios de ocupación romana. Algunos creen que el pueblo se fundó durante las invasiones vándalas: los nuevos conquistadores deportaron a un gran número de norteafricanos de Mauritania a Cerdeña, donde se mezclaron con los lugareños y dejaron un legado de sus rasgos físicos, aún claramente visible en la población de Sulcis, que sigue recibiendo el apodo de maurreddina.