Un vasto espacio verde en el centro histórico de Cagliari, que conserva miles de especies vegetales, algunas muy raras, procedentes de todo el mundo, y dentro de él una zona arqueológica que alberga un gran número de reliquias romanas. El Jardín Botánico, cuya superficie en forma de trapecio es de aproximadamente cinco hectáreas, ocupa la parte baja del valle de Palabanda, en una zona comprendida entre el Anfiteatro Romano,el Jardín de los Capuchinos y la Villa de Tigellio, donde también hay restos de otras domus romanas y de un edificio termal.

En 1820 se empezó a hablar de establecer un jardín botánico en el valle que había pertenecido a lo largo de los siglos a los jesuitas, al patrimonio Real y a varios particulares, hasta que fue adquirido por la Universidad. Las obras comenzaron en 1864 bajo la dirección del fundador Patrizio Gennari y calcaron el proyecto original del arquitecto Gaetano Cima.