Desde la Piazza Yenne, se sigue la subida que lleva a las Escaleras de Santa Clara, diseñadas en 1858 por Gaetano Cima y que conducen hasta el distrito del Castello. Allí se encuentra la escalinata de acceso a la iglesia.
Contexto ambiental
El edificio religioso está en los límites del distrito de Stampace, en una parte montañosa plana cerca de las murallas de Castello.
La orden religiosa de las Hermanas Clarisas fue instituida en 1212 y se remonta a la voluntad de Francisco de Asís. En un periodo de tiempo entre finales del siglo XIII y el primer cuarto del siglo XIV, Cagliari acogió a las Clarisas en Stampace, en el monasterio ya desaparecido que estaba dedicado a Santa Clara y que probablemente fue fundado en una época anterior por monjas de diferente orden. El convento de clausura de las Clarisas fue administrado por los frailes del cercano San Francisco de Stampace hasta 1587, cuando pasó a la tutela del Mensa episcopal por voluntad del Papa Sixto V. En 1895, tras la promulgación en 1866 de la segunda ley de supresión de las órdenes religiosas, el monasterio fue entonces administrado por el Fondo para el Culto. Si bien albergaba solo a siete de las veinte monjas documentadas por Martini en 1841, aún se encontraba en auge. En 1897, se convirtió en propiedad de la Comuna. Fue abandonado durante el siglo XX: en 1911 pasó a ser propiedad de la Intendencia de Finanza, para ser restituida a la Comuna en 1922 y finalmente ser seriamente afectada por los bombardeos aéreos de 1943. A ello le siguió la destrucción de gran parte de las ruinas, así como el establecimiento del mercado rional en 1957. Las intervenciones de excavación arqueológica y restauración llevadas a cabo entre 1980 y mediados de los noventa por la Superintendencia Arqueológica y la Superintendencia de BAPPSAE de Cagliari, han sugerido hipótesis acerca de la datación del complejo: la iglesia es del siglo XVII, pero se erigió sobre un aula románica anterior, mientras que la existencia del convento es documentada indirectamente desde las últimas décadas del siglo XIII, durante el reinado de Pisa. Por tanto, es probable que el área albergase un antiguo complejo monástico, más sobre el que luego se insertó el franciscano.
En lo que concierne propiamente a la Iglesia de Santa Clara, los documentos de archivo han determinado la preexistencia, probablemente en el mismo sitio, de una pequeña capilla. De hecho, de 1256 data el primer testimonio documental de la existencia de una iglesia dedicada a Santa Margarita, cuya fecha de fundación se desconoce. Ya en 1861, Spano sostuvo que el edificio actual fue construido en el siglo XVII con la consagración a Santa Margarita, según lo que pudo desprender de la inscripción "S MARGARITA V M 1690" grabada en el arquitrabe del portal lateral y todavía visible. Sin embargo, algunos estudiosos han sugerido recientemente la existencia de dos iglesias distintas, pero geográficamente cercanas: la Iglesia de Santa Chiara aún existente y la Iglesia de Santa Margarita, demolida en 1947.
El edificio dispone de una sola nave amplia con capillas laterales y presbiterio rectangular sobreelevado, menos alto y menos ancho que el aula. Los interiores muestran una rica decoración de estuco. La sobria fachada enlucida termina en un fastigio en forma de "gorra de carabinero", es decir, de arco doblemente inflexo, en este caso rematado con volutas. Asimismo, cuenta con dos aberturas cuadrangulares simétricas respecto al portal central, coronado por un pequeño nicho con cuenca decorada de concha, que antes albergaba una estatua. La nave tiene bóveda de cañón de medio punto y está articulada por intradoses establecidos sobre pilastras acanaladas y junquilladas por el capitel corintio, situadas en correspondencia con los contrafuertes exteriores. La bóveda descansa sobre una cornisa voladiza dentellada por encima de un friso decorado. El coro, donde las monjas participaban en las funciones litúrgicas, se apoya sobre un arco rebajado y presenta un nicho de concha decorado y un balaustre adornado con un emblema.
Cuando se construyó la iglesia en 1690, se colocaron en su interior algunas sepulturas cubiertas con lápidas de mármol, dos de las cuales, que datan del tercer cuarto del siglo XVII, han sido recientemente transferidas a la contrafachada. A principios del siglo XVIII, finalmente se construyó la sacristía al lado del presbiterio, la cual alberga una tumba reservada para la sepultura de las monjas.
Historia de los estudios
Se puede encontrar información sobre la iglesia en varias publicaciones sobre Cagliari.
Bibliografía
P. Martini, [i]Storia ecclesiastica di Sardegna[/i], III, Cagliari, Stamperia Reale, 1841.
G. Spano, [i]Guida della città e dintorni di Cagliari[/i], Cagliari, Timon, 1861.
F. Corona, [i]Guida di Cagliari e suoi dintorni[/i], Bergamo, Istituto Italiano d'Arti Grafiche, 1894.
R. Salinas, "L'architettura del Rinascimento in Sardegna . I primi esempi", en Studi Sardi, XIV-XV, parte II, 1955-57.
[i]Santa Chiara. Restauri e scoperte[/i], a cargo de A. Ingegno, Cagliari, Pisano, 1993.
M.G. Meloni, "Note sulla presenza delle Clarisse in Sardegna nel Medioevo", en Bollettino Bibliografico e Rassegna Archivistica e di Studi Storici della Sardegna, XI, fasc. 18, 1994.
M. Pintus, "Architetture", en [i]Cagliari Quartieri storici. Stampace[/i], Cinisello Balsamo, Silvana, 1995.
M. Dadea - S. Mereu - M.A. Serra, [i]Arcidiocesi di Cagliari[/i], colección "Chiese e arte sacra in Sardegna", Cagliari, Zonza, 2000.